Esta semana ha salido publicada una noticia que sorprende a
pocos: el 20% de la campaña de la candidata del Sistema a la Casa Blanca, Hilary Clinton, ha estado financiado por
Arabia Saudita. La colaboración entre
las elites americanas y las elites saudíes es algo evidente desde hace décadas.
La campaña norteamericana también se ha complicado cuando el candidato
anti-sistema ha acusado de Hillary de ser la creadora del ISIS y ha pedidos la
intervención de informáticos rusos para comprobar esta acusación a través de
sus correos electrónicos.
Esta alianzas de Estados Unidos con el islamismo saudita y
con el Estado de Israel, han determinado la política en Oriente Medio de la
Casa Blanca, que se ha caracterizado por bombardear e intentar derrocar todos
los regímenes nacionalistas –con más o menos inspiración socialista- de la
zona, que a su vez eran los que contenían al islamismo radical y a la
inmigración masiva hacia Europa, los casos son claros: Saddam Hussein en Irak,
Gadafi en Libia y Assad en
Siria, donde sólo la intervención rusa ha evitado la catástrofe. En este caso
vale la pena recordar que EE.UU Francia y Reino Unido comenzaron bombardeando
al régimen de Assad y armando a la oposición islamista, con el explícito apoyo
de Mariano Rajoy, no lo olvidemos.
Phillipe de Villiers,
antiguo secretario de Estado para la Cultura durante el gobierno de Jacques
Chirac y quien fuera candidato a las elecciones presidenciales francesa,
confirma todo esto en una reciente y clarificadora entrevista a “L´Observateur
du Maroc et d´Afrique”, añadiendo que los más grave para nosotros es que los
gobiernos europeos han perdido toda soberanía para convertirse en meras
colonias de los Estados Unidos, siguiendo por lo tanto la absurda y nefasta
política de la Casa Blanca en Oriente Medio. Villiers aboga por romper con esta
sumisión, promover una política de
alianzas euro-rusa y apoyar política, diplomática y militarmente a los
regímenes que son aliados objetivos en la lucha contra el caos y el terrorismo
islamista, poniendo el ejemplo de Siria.
En su entrevista Villiers responde con nombres propios a la
pregunta sobre quiénes serían los responsables de la oleada de atentados en
Europa, señalando al “pseudo-intelectual” Bernard Henry Lèvy y al economista y
escritor, Jacques Attali, ambos
judeo-franceses, que fueron y son acérrimos defensores de la política de
“puertas abiertas” contra la inmigración y hoy atacan constantemente a Francia
calificándola de ignominiosa y dando así “justificación intelectual” a los que
la atacan.
El terrorismo islámico es una realidad muy grave y que va a
condicionar la situación política de Europa en los próximos años. Por eso mismo
hay que analizarlo en profundidad y no caer en la fácil manipulación de apoyar
o pensar en alianzas y sinergias, precisamente con quien lo ha provocado.
Enric Ravello Barber.
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